30.8.11

En mareas misteriosas

¿Os acordais cuando hace poco me preguntaba a mi mismo si la vida personal de un actor puede influenciar en cómo le vemos en pantalla? Puede que sea injusto con ella, pero me creo más como actor al mono pirata de Barbossa que a Penelope Cruz.
Lo siento, pero esas caras, esas expresiones, esos mohines injustificados, ese tono de voz... todo en ella me parecía tan falso como un billete de seis euros.
Todo lo contrario que Johnny Deep, que sigue sobreactuando de la misma manera a su Jack Sparrow y convirtiéndolo, one more time, en lo mejor de la película. Película que, por cierto, es la más floja de las cuatro.
Si tuviera que quedarme con algo, sería con la secuencia de las sirenas, perturbadora e inquietante a partes iguales y sin duda lo mejor del film. El resto, pues bueno, aventurillas piratas con trasfondo sobrenatural de fondo indispensable en la saga, disfrutable y entretenida.
Pero la más floja de las cuatro.
La historia del clérigo y la sirena, además, parece puesta ahí para alargar la película, porque ninguno de los personajes es tan indispensable o carismático como para que necesites saber qué pasa con ellos. A menos que les tengan un destino reservado en la quinta parte, claro. ¿Habrá quinta parte?

29.8.11

Sin límites

El cada día más de moda Bradley Cooper protagoniza esta película sobre una nueva droga de diseño capaz de permitir el acceso al 100% del cerebro y convertir al yonkie de turno en el tipo más inteligente del universo.
La trama se centra en un escritor que se enfrenta a un bloqueo del que no es capaz de salir por sí mismo, un hombre que es un desastre en todos los sentidos que puedas imaginar, hasta que cierta pastillita transparente hace aparición. Entonces, las cosas cambian, y somos testigos del meteórico ascenso todopoderoso del señor Cooper. Y sí, la peli está bien hecha, tiene partes muy interesantes, pero a medida que va avanzando y avanzando, de repente uno tiene la sensación de que en realidad... no hay nada que se interponga en el camino de Cooper.
Quiero decir... en todos los guiones del mundo hay obstáculos que el protagonista debe ir superando en su camino hacia el climax final, de menor o mayor intensidad. En Limitless no hay nada. Vale, sí, en un momento dado te meten a un tipo misterioso siguiendo a Bradley Cooper por las calles, en otro momento dado te meten un efecto visual extraño para demostrar que las pastillitas pueden ser perjudiciales para la salud, e incluso también llegan a decir que dejar las pastillas supone la muerte. Que sí, pero en ningún momento de la película, en ninguno en absoluto, uno tiene la sensación de que realmente esos peligros planean sobre el protagonista y éste debe superarlos. El de que se le acaben las pastillitas un poco más, pero tampoco demasiado, la verdad.
Así que al final, me encontré con una película que era como ver Supermán sin kriptonita de por medio. La historia de Todopoderoso contada con más o menos gracia pero sin más.
Y Robert De Niro... bueno, pues se pasea por sus tres secuencias poniendo su mejor cara de Robert De Niro y ya está. En realidad, es una película a absoluta gloria de Bradley Cooper.

27.8.11

Vigila quien llama

Cuando estrenaron Scream 4 en el cine levanté la mano cual alumno educado y anuncié solemnemente que quería verla. Cris me miró con una ceja enarcada y me dijo que ella no había visto ninguna de las otras tres.
Quedé patidifuso. Me sobrepuse y decidí que veríamos la trilogía juntos para abrir boca y ver la cuarta después. Ayer vimos Scream 3, cerrando la trilogía inicial. En días venideros veremos la cuarta, pero de momento, aquí va mi opinión sobre esta re-visión que he hecho sobre la saga.
Sigo pensando que Scream 1 es una gran película de asesinos de adolescentes, sobre todo porque rompió moldes en aquel momento, todo gracias a la frescura del guión pergeñado por Kevin Williamson y a las múltiples referencias fímicas que contenía. Recuerdo que aquí en España la tradujeron como "Vigila quien llama", un título absurdo a añadir a la lista de traducciones de películas ridículas y que nadie utilizó jamás. La película fue conocida como Scream y punto.
El caso, que vista ahora, toda la parte inicial resulta un poco... demasiado infantil. Sobre todo por la relación entre Neve Campbell y Skeet Ulrich, con esa cursilería americanoide del no tener sexo y querer tenerlo que hace que los diálogos suenen hoy desfasadísimos. Tal vez ya sonaban así en su momento, pero la vi con 16 o 17 años y no me sonaron tan horrendos entonces.
Pero es una peli con fuerza, y sigue resaltando por su ingenio a la hora de desvelar el misterio y la identidad del "asesino". Brutal giro de guión que fue lo que encumbró a Scream al podio del cine del terror adolescente y que aún hoy sigue sorprendiendo por su ingenio.
La siguiente fue Scream 2. Recuerdo que en su momento, perdida la capacidad de sorprender al ser una secuela, me gustó menos que la primera pero aún me pareció entretenida. Vista hoy me ha resultado incluso mejor que la primera, exceptuando el hecho de que el giro final nunca será tan impactante como lo fue el de la primera. Pero como película es más redonda, algo más elaborada, y las referencias cinéfilas y metalingüísticas son fantásticas. Y además sale Tymothy Oliphant, taaan joven, taaan alejado de Rayland Givens...
Y por último, vista ayer, Scream 3. La tercera parte de la saga era, en principio, el final. Y así fue hasta que decidieron resucitarla este año, en realidad. Aquí, el nivel de referencias cinematográficas y autoparódicas raya el paroxismo, pero sigue siendo lo mejor de la película. Se produce un cambio de poder, Neve Campbell deja de ser la protagonista absoluta y cede el espacio al duo cómico formado por Courtney Cox y David Arquette. Courtney Cox que va siempre acompañada de esa referencia absurda a sí misma que es la Gale Weathers de Puñalada 3. Como he dicho, todo ese juego sobre el cine dentro del cine y la película sobre lo que ya hemos visto mil veces es lo mejor de Scream.Ah, y el regreso en forma de testamento audiovisual del hombre que tiene todas las respuestas sobre las sagas cinematográficas y que, aquí, da la clave para hacerle frente al capítulo final de una trilogía.
Recuerdo que, en su momento, Scream 3 me pareció una basura. Hoy no me ha parecido tan mala. Sí, es floja, la más floja de las tres, pero desde luego, no me ha parecido una basura.
Tengo ganas de enfrentarme con la cuarta. Y volver a verle la cara al asesino con la máscara más chorra de los últimos años. Y ya os diré lo que pienso...

25.8.11

A vueltas con los monos

De pequeño me flipaba "El planeta de los simios". La primera vez que la vi, recuerdo que salté del asiento y me llevé las manos a la boca al ver aquel plano final tan jodidamente espectacular.
Aquello marcó el inicio de una saga que me tragué religiosamente, a pesar de la calidad decreciente de las siguientes cintas.
Después, hace ya unos años, Tim Burton se atrevió con el remake del mítico film de Charlton Heston. Era obvio que iba a ir a verla al cine. ¡Dirigida por Tim Burton, el tipo que me acojonó con Batman e hizo joyitas como Beetle Juice o Eduardo Manostijeras! ¡Y protagonizada por Mark Whalber, al cual tenía en buena estima vete tu a saber por qué!
Ni siquiera podía imaginarme que estaba a punto de tragarme semejante truñaco. A partir de entonces, Burton cayó en esa lista de "directores a los que no sé si adorar o matar". Capaz de hacer maravillas como Ed Wood o Big Fish y basuras infernales como Charlie y la fábrica de chocolate.
En fin...
Hoy he ido a ver "El origen del planeta de los simios", también conocida como "Hollywood quiere seguir viviendo de las rentas de una película de hace treinta años". No me esperaba nada bueno, después de la Burtonada, pero los simios me llaman cual sirena a marinero.
Coño, me ha sorprendido para bien.
Me ha gustado. Me ha parecido una película entretenida, una cinta de aventuras, ciencia ficción que se deja ver por todas las edades, con un trasfondo en la historia, con unas actuaciones más que aceptables, y con un Andy Serkis que dota a César, el mono principal, de un carisma brutal.
Lo único que me ha jodido, y bastante, es que por querer hacerla para todos los públicos, la revolución de los simios ha sido pelín light. Me hubiera esperado, y me hubiera gustado ver, algo más sangriento. A los monos haciéndose con el mundo a la fuerza y por la sangre.
Pero bueno, no desmerita a la película, que como digo, está bastante bien.

24.8.11

We are the night

Hoy he visto una peli de vampiros alemana de título Wir sind die nacht, o lo que es lo mismo "Nosotras somos la noche". Y oye, después de la intro a bordo de un avión me encontré a mi mismo preguntándome: ¿Esto me ha parecido interesante o me da miedo que sea una pastelada donde pinte más esa búsqueda del amor que los vampiros?
La peli mola, y mola bastante. Es cierto que hay una parte, después de que la protagonista se convierta, en que parece que la cosa va a ir de cuatro feministas saliendo de fiesta, poniéndose hasta las trancas y yendo de compras en sus coches mega guays toda la noche en plan Pretty Woman.
Por suerte no es así, y aunque exista ese rato en la película, luego la cosa es bastante adulta. Nada de vampiros que brillan a la luz del sol ni bobadas de esas. Las chicas son guerreras y sangrientas. Y bastante, además. Vampiresas de las que dan ostias y sacan los colmillos para secar a los pobres humanos que se cruzan con ellas.
Una cosa sí me chocó bastante al principio. La jerarca del grupo busca encontrar "los ojos", y los encuentra en la protagonista. Durante el primer cuarto de hora le dice como en tres ocasiones "que ojos más bonitos" o cosas así... ¡¡¡Por dios, pero si tiene unos ojos horrendos!!! La chica mejora bastante cuando se pone guapa, pero al principio es bastante adefesio la pobre. En fin, me hizo gracia eso. Es como decirle a Rosie De Palma "que nariz más bonita tienes".
Ah, la peli juega sobre bases mil veces vistas en las historias de vampiros: el sol las mata, beben sangre, no se reflejan en los espejos... cosas que da gusto ver, pero también juega una nueva baza, la de que sólo haya vampiresas en el mundo, y ningún hombre. Fue un detalle curioso cuya explicación, dada de paso y sin prestarle atención, además me gustó.
Un descubrimiento Jennifer Ulrich, que no es la prota de ojos feos sino una de las otras vampiresas, depresiva y triste durante la mayor parte del tiempo. Aquí os la dejo.

¿La vida personal de un actor afecta a nuestra percepción sobre su trabajo?

Es una pregunta que me hago de forma constante. Es algo común el hecho de que cuando un actor o actriz americano se ve envuelto en algún tipo de escándalo, de repente su lista de proyectos se resiente. El caso más reciente, Arnold Schwarzenegger y su divorcio que ha hecho que tres de los proyectos en los que se nombraba al actor tiemblen y al menos otros dos se vayan al garete.
¿Tanto nos influencia? Es cierto que todos, sin excepción, alguna vez hemos dicho eso de "paso de ver esta peli que fulanito no me cae bien". Que coño, de los que por aquí nos pasamos a menudo todos nos echábamos las manos a la cabeza cuando supimos que Bardem era el elegido para interpretar a Roland Deschains, hasta el punto de que, porque nos puede más el fikismo por La Torre, que si no, ni veríamos la serie.
Pero claro, es un caso flagrante de percepción pura y dura. Quiero decir... Bardem no es ni mejor ni peor actor porque nos parezca un gilipollas o nos caiga de puta madre. Ni siquiera le conocemos, pero lo que sabemos de él a través de los medios, o simplemente lo que su cara nos transmite, hace que nos produzca rechazo o aceptación.
A mi, por ejemplo, siempre me ha caído en gracia Kiefer Sutherland, desde pequeño que le vi en Cuenta conmigo o en Jóvenes ocultos (peliculón, por cierto). Es más, empecé a ver 24 sólo y exlusivamente porque aparecía él, y eso que llevaba unos años haciendo truñacos de los grandes. Y gracias a eso descubrí una gran serie, pero eso es otra historia.
Por la misma razón, nunca he visto ni ganas que tengo por mucho que digan que es genial, Dos hombres y medio. No soporto a Chalie Sheen.
Me cae genial Steve Buscemi y me hizo darle una oportunidad a Boardwalk Empire.
Me cae mal Penélope Cruz y me da tanta rabia que salga en Piratas del Caribe que, a pesar de lo bien que me cae Johny Deep, no fui a verla al cine. Influyeron otros factores también, pero no vienen al caso.
¿Hasta qué punto nos influye? Se ve que los americanos piensan que mucho. Porque son un montón los actores que se han visto envueltos en algún lío y no han sabido remontar sus carreras. Aunque también los hay que sí, y si no que se lo digan a Robert Downey Jr.
Y eso que hasta ahora hemos hablado de la simple apreciación del "me cae bien o mal". Pero recuerdo cierto actor secundario de los ochenta envuelto en un caso de pederastia que aún hoy sigue haciendo películas. Claro que es secundario. ¿Pasaría algo si de repente descubrieran que un frontman tipo Cristian Bale hace lo mismo?
Desde luego, Mel Gibson hacía cosas antes, pero desde que le acusan de zurrar a su mujer está más que desaparecido.
Claro que, en el lado opuesto, Roman Polanski, a pesar de sus líos con la justicia y esa supuesta agresión sexual a una menor, sigue haciendo sus películas y sigue siendo considerado uno de los mejores directores del mundo... claro que, por otro lado, tampoco es que llene salas en plan blockbuster.
¿Qué opinais vosotros? ¿Qué actores os caen mal y os jode ver en una película? ¿O cuales os caen tan bien que os mueven a ver algo sólo por su presencia?

23.8.11

El aprendiz de brujo

Y una vez más, vuestras pesadillas se harán realidad, humanos... ¡¡¡¡El peluquín de Nicolas Cage está de regreso!!!! ¡¡¡¡¡¡Y en múltiples variedades!!!!
En serio ya... ¿Quién asesora a este señor en cuestiones capilares? ¿Es decisión suya? ¿Están los fabricantes de peluquines detrás de esta gran conspiración? ¿O simplemente los productores americanos tienen ya como chascarillo el intentar que el look del pobre Nick sea cada vez más paródico?
En fin...
El aprendiz de brujo es una peli Disney y si queréis verla, tenéis que verla con esos ojos. Vas a encontrarte con una historia simpática, de aventurillas, con esos toques de "el amor debe ir primero a cualquier otra cosa" y donde todo, todo, todo al final saldrá bien. Porque el señor Disney lo ordena así y nosotros, simples mortales, aceptamos y callamos.
En fin, que la cosa es entretenida si te dejas llevar y la ves con ojos de niño. Yo aborrecía Fantasía cuando era un crío, y de ella sólo recuerdo aquella famosa escena de Mickey y las fregonas. Bueno, pues han cogido esa escena, la han transformado en imagen real-ordenadoril y luego se han inventado una historia alrededor. Sin importar si esa historia es inteligente o no, que esto es Disney y lo único que pretenden es que los niños flipen y se encariñen de la magia y sueñen y blablabla...
Y además sale Monica Bellucci, que a pesar de la edad sigue manteniendo un gran tipo y está de muy buen ver. Aunque lo que es verla, poquito. Y no sólo porque salga más vestida de lo normal, que esto es Disney, os lo recuerdo, sino porque su papel es meramente anecdótico.
Si hubiera visto esta película con diez años me habría flipado, estoy seguro. La he visto con treinta y dentro de unos meses me costará recordarla. Pero si algún día hago retrospectiva en el blog... Víctor, acuérdate, esta mola para tus hijos.
Back to the future...

Las vidas posibles de Mr. Nobody

Por lo general, mi jefe y yo tenemos un gusto muy similar en cuanto a películas, y es por eso que suele recomendarme películas que le molan. Prácticamente todo el cine japonés que veo (que no es mucho, para que negarlo) es recomendación suya. Es un forofo de los orientales, aunque ese forofismo no lo comparto.
En fin, a lo que iba, que ayer taché otra peli de la lista de "pelis que me recomienda el jefe". En este caso, "Las vidas posibles de Mister Nobody", una película cuyo cartel español es la mierda patética que podéis ver a la izquierda.
Olvidemos ese espanto promocional y centrémonos en lo que de verdad importa. Cuando la película da comienzo uno asiste a unos primeros minutos desconcertantes, donde ve morir a Jared Leto de cinco o seis formas distintas... para acto seguido despertar como "el hombre vivo más viejo" en el año 2092. Cojonuda la caracterización por cierto.
Y a partir de ahí arranca la película de verdad, contándote la historia de Nemo Nobody, un niño que no supo enfrentarse a la dureza de "tener que tomar una decisión" y que, por tanto, vive varias vidas de forma paralela.
Un ejercicio de "Que hubiera pasado si...", mostrando al mismo tiempo todas las opciones con sus distintos discurrires.
Me ha encantado. No sólo porque el planteamiento me parece super interesante (que levante la mano aquel que nunca haya pensado "que habría sido de mi vida si en lugar de hablar con esta chica hubiera hablado con tal otra") sino porque además, visualmente la película es muy potente. Sinceramente, lo que menos me interesó de toda la historia es el mundo futuro, ese 2092 con Nemo Nobody ancianísimo y relatándole su historia a un periodista con cara de panoli. Lo que te atrapa con fuerza de esta película es la historia de Nemo y sus tres posibles mujeres, dependiendo de los caminos que tome en la vida. Pero sobre todo con el personaje que de adulta interpreta Diane Kruger (preciosa como siempre).
Jared Leto borda el papel (o los papeles) de Nemo Nobody.
Y especial atención a la secuencia donde, con la voz de un niño, explica el proceso de su propio nacimiento, la selección de los padres a modo de casting y las pequeñas cosas que ve un niño y que le resultan llamativas.

22.8.11

Teen Wolf (y van dos...)

No todos los días hay True Blood o Breaking Bad, y estoy intentando estirar al máximo la cuarta temporada de Batlestar Galactica, así que, entre medias, sin prisa, aprovechando días muertos sin nada que ver (y sobre todo los viajes en AVE a Valencia los fines de semana) al final he terminado tragándome enterita la serie de Teen Wolf que revisitaba aquel clásico ochentero protagonizado por Michael J. Fox.
En este enlace, la crítica que hice cuando apenas llevaba tres capítulos...
La cosa no difiera mucho de aquella primera crítica. Es una serie para adolescentes sobre un chaval que se enamora de una chavala. Lo de que le muerda un hombre lobo no deja de ser una tontuna cualquiera, como podría haber sido un vampiro, una tortuga ninja o un extraterrestre.
La serie tarda muchísimo en arrancar de verdad. No aprietan el acelerador con la trama hasta bien entrada la temporada, lo cual en estos tiempos donde The Vampire Diaries nos ha demostrado que en las series de adolescentes las cosas pueden ir a toda velocidad (recordemos que se cargaban a una de las protagonistas en el capítulos cuatro o cinco), pues como que te deja un poco indiferente. Además, el protagonista no es excesivamente carismático. Por no decir que a veces te dan ganas de pegarle una colleja para que espabile. Si algo bueno tiene The Vampire Diaries es que no importa si te hablan de una plaga vampírica que asolará el mundo o de si este vestido y esos zapatos no conjuntan para la fiesta a la que van a ir esa noche, porque todo es un gran problema al que esa adolescente protagonista que es Helena debe enfrentarse. Y al final, todo se centra en ella, como debe ser, porque los adolescentes deben pensar que ellos son los que mayores problemas tienen en el universo (y por supuestísimo los adultos no les entienden) pero al final, son ellos los únicos que pueden resolverlos.
Teen Wolf falla en eso también. Scott es un tipo bastante soso, y sus problemas no dejan de ser, continuamente, si ahora me quiere o no me quiere. Unido a esa falta de carisma que comentaba antes y a esa velocidad lenta en la trama, al final no pasa de ser una serie que se deja ver pero que sin más.
Ah, y con unos efectos especiales de lo más chusqueros. Terroríficos. Mucho más que un hombre lobo.
No todo es basura. El capítulo donde los protagonistas se quedan encerrados en el instituto y son asediados por el Alfa es de lo mejor de la temporada, sólo sobrepasado por los dos capítulos finales. Aprietan el acelerador como debe ser al final de temporada, y la cosa se pone interesante. Evidentemente, plantan sus semillas para la segunda temporada. ¿La habrá? Ni idea, no me he informado sobre ello.
Lo mejor, para mi, el amigo de Scott. Su histrionismo me hacía recordar en ocasiones al gran Logan de Verónica Mars (valgan las distancias, por dios santísimo). Desde luego, el mejor actor de toda la serie. Además de contrapunto cómico.

20.8.11

Libros leídos 2011 (14): Juego de Tronos

Libros Leídos en 2011:
1) El Talismán, de Stephen King y Peter Straub
2) Oscura, de Guillermo del Toro y Chuck Hogan
3) Muy pronto seré invencible, de Austin Grossman
4) Cuernos, de Joe Hill
5) El pasaje, de Justin Cronin
6) La búsqueda del grial 1: El castillo de las sombras, de J.H. Brennan
7) Apocalipsis Z 3: La ira de los justos, de Manel Loureiro
8) Nivel 26, de Anthony E. Zuiker y Duane Swierczynski.
9) Antirresurrección, de Juan Ramón Biedma
10) La casa infernal
, de Richard Matheson
11) Superviviente, de Juan García Hernández

12) Los caminantes, de Carlos Sisi
13) Bikini, de James Patterson
14) Juego de Tronos, de Geroge R.R. Martin
Y sí, al final hice caso a Sonix y demás que hablaron tan bien de la saga literaria que ha dado una de las mejores series de 2011... si no la mejor.
Y ya me lo he acabado. He tardado casi un mes, pero es que es un tochaco de casi 800 páginas.
Era reticente, sí, porque por lo general las novelas de fantasía me aburren soberanamente, así que lo primero que me sorprendió, gratamente, fue que apenas llevaba veinte o treinta páginas y ya fascinaba. Lo cierto es que la prosa de George R.R. Martin se lee como si fueran pipas. Tiene un estilo ágil, visual y atractivo. Sumado a la forma en la que está escrita la novela, dividida por capítulos que toman a uno de los protagonistas y narran los hechos desde su punto de vista, hace que cuando te das cuenta, vayas a la mitad de la novela.
Sinceramente, me ha encantado.
Ahora, otra cosa que me ha sorprendido es que la adaptación a serie por parte de la HBO haya sido tan sumamente fiel. Siempre es mejor una novela que una película/serie, no hay color con el poder de la imaginación y las barreras que un libro sí puede cruzar pero una obra audiovisual no, pero la serie de HBO prácticamente ha calcado los hechos narrados en la novela, así como muchísimos de los diálogos.
Y digo prácticamente, porque no es total. Omitir, para la serie, apenas han omitido detalles, ninguna parte crucial ni ninguna acción ha sido mutilada... a excepción de una: El enfrentamiento entre las tropas de Tywyn Lannister y los pocos soldados que envía Robb Stark a la muerte es en el libro un capítulo narrado desde el punto de vista de Tyrion, que sí está presente en la batalla. La opción que tomaron en la serie es mucho menos visual, le da menos fuerza al personaje de Tyrion... pero claro, es más barata.
Añadir, sin embargo, en la serie han añadido dos secuencias, que ahora recuerde, y que no están en el libro. La presentación de Tyrion Lannister, en un burdel de Invernalia, no aparece en la novela, así como tampoco aparece la secuencia donde Meñique habla sobre sus planes ante dos putas que hacen el amor, ésta última una de las mejores secuencias de toda la serie, así que no me importa que la hayan añadido.
Y poco más, por lo demás ha sido bastante fiel. Pero estaba hablando del libro. En la novela, una de las cosas que más me llamaron la atención, y aquí si difiera a la serie, es la edad de ciertos personajes. Robb Stark apenas tiene 14 años cuando todo ocurre. Y Daenerys, por dios, en el libro sólo tiene 13 años. Es evidente que no podían coger a una niña para hacer semejante papel, pero desde luego, la historia tiene mucho más empaque, mucha más profundidad y mucha más fuerza, si eres consciente de que, todo lo que le pasa a Daenerys, todo lo que sufre y la transformación mental que atraviesa, está ocurriéndole a una niña de 13 años. Es mucho más brutal.
Lo vuelvo a decir: Como novela, Juego de Tronos está genial. La recomiendo, sí. Yo ahora me voy a leer la segunda parte de Los Caminantes, pero en cuanto acabe, cogeré con muchas, muchas, muchas ganas el segundo volumen de la saga de Martin: Choque de Reyes. Y sé que cuando lo haga quedaré de nuevo absorbido por la fuerza de los personajes que habitan los Siete Reinos... y las tierras más allá del mar.

18.8.11

Iron Man 2

Recuerdo cuando Robert Downey Jr era un actor regulero más conocido por sus actividades delictivo-alcohólicas que por su carrera cinematográfica. Y hoy es un actor de cierto prestigio que está hasta en la sopa.
Viendo Iron Man 2 me dije, one more time, que nadie domina el lenguaje del entretenimiento como los americanos. Eso es así, y es innegable. Iron Man 2 no pretende hacer buen cine, ni deleitarnos con una fotografía de premio, sino hacer que pases dos horas pegado a la pantalla mirando como dos robots de ordenador se pegan de ostias, y que lo hagas con una sonrisa en la cara o con el espíritu del niño que llevas dentro en los ojos.
Para mi, lo consigue de sobra. Y eso que Iron Man es un superhéroe al que conozco por las películas, porque nunca llegué a leer sus comics. Downey Jr. ha creado un Tony Stark tan irreverente como magnífico, y Rourke se marca un villano digno de elogio. Y por si fuera poco, tenemos a la Johansson en un papel bastante tonto pero con una de las mejores secuencias de la película, cuando se desata como la-superheroína-que-sea mientras el pobre Jon Fabreau se lía a puñetazo limpio contra un guardia de seguridad.
En fin, palomitas y acción.

16.8.11

NEDS

NEDS podría traducirse como Delincuentes sin educación. Es la tercera película de Peter Mullan, a la par que director de los buenos, gran actor, que se reserva en NEDs el papel de padre borracho y maltratador del protagonista, John McGill, un chaval de los que sacan buenas notas, de los que van a llegar a ser algo en la vida, un cerebrito, de los que han tenido la mala suerte de nacer en el lugar equivocado.
Porque al final, es el entorno el que convierte a McGill en lo que es. No su padre, ni la estricta sociedad de aquel entonces, ni tampoco su hermano delincuente. El entorno, ese barrio lleno de chavales pecosos y malencarados ante los cuales no querrías cruzarte por la noche.
Aterradora película, y no porque de miedo, sino porque asusta ver lo que es capaz de hacer el ser humano, el sinsentido de las confrontaciones de esas bandas callejeras dispuestas a degollar al contrario solo por demostrar su superioridad.
Y en el centro, McGill. Niño bueno que deviene en demonio.
Gran película. De metraje excesivo que convendría haber recortado, pero gran película.

Primos

Ya van dos comedias españolas en unos meses que me han encantado. Sinceramente, suelo tener malas expectativas cuando se trata de cine español cómico, pero tanto No controles como Primos se alejan de esa imagen de cine castizo soez y vulgar que tanto suele hacerse en este país para contarte una historia romántica con buena carga de humor.
Lo mejor de Primos es, casi seguro, el personaje de Quim Gutierrez (me lo tiro), con esa verborrea nerviosa, ese pasar de la risa al llanto en apenas segundos, ese monólogo inicial (sencillamente, de aplauso) y ese monólogo final (¡¡¡Un sobao!!!!).
Su personaje es genial, sí, pero el de Adrián Lastra no se queda atrás. Su propensión a la enfermedad y su locura implícita hace del personaje no sólo lo más surrealista de la película sino también lo más tierno.
Daniel Sanchez Arévalo se ha marcado una película tan correcta como correctas son los asentimientos de Antonio de La Torre. Correctísimo. Una película con la que vas a reírte, a disfrutar y a ver actores bien dirigidos interpretando como debe ser.
Mención aparte para los Back Street Primos. Momento sublime.

11.8.11

Battlestar Galáctica: Razor

Entre la tercera y la cuarta temporada de Battlestar Galáctica, Syfy produjo y emitió una película ambientada en el universo de BSG y titulada "Razor". Sin embargo esta película se sitúa temporalmente en mitad de la segunda temporada, después de la llegada de la Pegasus, y mediante flashbacks nos hará retroceder aún más, para visualizar los eventos que llevaron a la Pegasus a ser lo que era cuando se encontraron con la Galáctica, e incluso más allá, a la primera guerra Cylon.
En general, Razor no es más que un capítulo largo y bastante normalito, con algunas partes más bien aburridas y otras bastante interesantes. Obviamente, entre las interesantes está todo lo que envuelve al personaje de Michelle Forbes, magnífica allá por donde pasa siempre, y aquí tan brutal y fría como demostró en la segunda temporada.
Pero lo cierto es que a pesar de la potencia de su personaje y lo interesante que pueda resultar saber las penurias y situaciones morales que atravesó la Pegasus, lo cierto es que la película no es nada del otro mundo. Y sin embargo, hacia el final tenemos el desenlace de la misión de búsqueda y rescate, y con ella, una revelación que, de cara a la cuarta temporada, es tan reveladora como apocalíptica, y aunque sea sólo una frase, es tan importante que vale por todos los momentos lentos que hayas tenido que pasar para llegar hasta ella.
Cuarta temporada de BSG... allá voy!!!!

10.8.11

Survivor: Desire

Corren rumores de que la temporada 24 de Survivor volverá a ser un especial, un Allstars 2 es lo que más se escucha en el mundillo foril. De momento, tenemos que conformarnos con el regreso de dos jugadores de temporadas pasadas a la nueva modalidad de Redención. En Septiembre volveremos a ver las caras de Ozzy y Coach, dos jugadores tan distintos como interesantes.
El caso, que me puse a pensar y decidí mostrar qué 20 jugadores traería yo de regreso al juego. Para hacerlo un poco más interesante, me he alejado de aquellos que ya han jugado más de una vez. Por mucho que me encantaría volver al gnomo diabólico Russell Hantz en juego, o a Candice, Steph o Rob Cesternino, ni siquiera les he mentado.
Os invito a ojear mi selección:

1. Jane (Nicaragua). Una verdadera guerrera. Con sus más de cincuenta años avergonzó en los retos a tipos musculosos como Benry o ese que iba de guapo y cantaba country y cuyo nombre no recuerdo. Además, sacó sus garras cuando tuvo que hacerlo. Creo que Jane volvería a dar juego si la dejaran volver.
2. Shambo (Samoa). Shambo era más rara que un perro verde, pero lo cierto es que supo utilizar esa rareza para avanzar, y saba bastante juego.
3. Sierra (Tocantins). Nadie simboliza tan bien como esta chica el término "underdog". Predestinada a ser expulsada desde el momento en que pisó la alfombra de salida, Sierra se aferró con uñas y dientes a cualquier resquicio que le permitiera sobrevivir un día más. Una de las mejores jugadoras de los últimos años.
4. Stephanie Valencia (Redemption). Dentro de esa desagradable tribu llamada Zapatera, sólo Stephanie intentó sembrar algo de caos cuando se supo perdida. Para mi, una verdadera pena que no avanzara más de lo que lo hizo. Creo que podría haber dado mucho juego.
5. Twila (Vanuatu). Porque era retorcida, pero a la vez, lo suficientemente capaz como para esgrimirse como lider durante buena parte del juego.
6. Ken (Gabón). Juro por dios que odié a este tipo asiático durante la mayor parte del programa, siempre me pareció un vago y un aprovechado, pero desde luego, tenía una mente capaz de hilvanar jugadas malignas con tal de seguir adelante.
7. Erik (Micronesia). Candidato a "la jugada más tonta de la historia de Survivor", Erik era un tipo simpático, amable, gracioso, atlético y capaz. Sin embargo, pecó de inocente. De muy inocente. De estúpidamente inocente.
8. David (Redemption). Se dio cuenta demasiado tarde de que estaba jugando en el bando estúpido del programa, pero al menos intentó hacer algo para solucionarlo. Siempre me pareció que era un tipo que podía dar más. Supongo que al ser tan inteligente como dicen que es.
9. Brandon (Guatemala). Buen jugador a nivel físico, capaz de hacerse camino.
10. Ace (Gabón). Para mi, fue el mejor jugador de esa temporada. Su acento le valió todo tipo de enemistades dentro del juego y no fue capaz de levantar cabeza después de eso, pero lo intentó con todas sus fuerzas. Para mi, su desempeño en el reto de la serpiente fue tan impresionante que me hace querer volver a verle en juego.
11. Brenda (Nicaragua). Al empezar su temporada, Brenda parecía una gran estratega que prometía dar buenas horas de juego. Acabó diluyéndose por una pasividad antinatural ante el peligro, pero creo que tiene estilo y carisma suficiente como para resultar un buen retorno.
12. Corinne (Gabón). La perra de Gabón debería haber vuelto al Héroes contra Villanos, siempre lo he pensado y sigo defendiéndolo. Me encantaría volver a escuchar sus comentarios sarcásticos y maliciosos...
13. Dani (Guatemala). Sobre ella sobran las palabras. Debería volver y punto.
14. Erinn (Tocantins). Parecía poca cosa cuando empezó la temporada, pero acabó resultando una jugadora de carácter y con muchas opciones.
15. Heidi (Amazon). Una mujer capaz de despelotarse por un tarro de mantequilla de cacahuete merece un regreso al juego.
16. Todd (China). Otro para el que sobran las palabras, uno de los mejores estrategas que han pasado por Survivor, con perdón de Russell Hantz y Rob Mariano. El único capaz de hacer que Jean Robert se callara merece volver al juego por segunda vez.
17. Stephen (Tocantins). Su inteligencia le hizo ganar un reto de inmunidad de forma increíble. Supo alinearse a las personas correctas y hacerse un camino durante toda su temporada. Creo que sería una buena opción.
18. Shane (Exile Island). En realidad, a mi no me parecía para tanto este jugador, pero es cierto que está como una cabra y desquiciaría a más de uno.
19. Sash (Nicaragua). Una buena mentalidad para el juego que luego tuvo un desempeño regulero. Sin embargo, es de los que se aferran con uñas y dientes y muerden y arañan para aguantar un día más.
20. Phillip (Redemption). Si hay alguien capaz de desquiciar al resto, ese es este ex-agente del FBI que está como las maracas de machín. Y sin embargo, casi casi casi lo logró.

Y hasta aquí mis seleccionados, pero como soy así de expléndido, añado dos extras por si acaso alguno de los anteriores no cuaja...
Marissa (Samoa): Sé que mucha gente al ver este nombre dirá "¿Pero qué dices? Si Marissa se fue la primera en su temporada, si no hizo nada..." Y sí, es verdad, pero esta chica no sólo es preciosa, sino que además fue la única en darse cuenta, antes de que fuera demasiado tarde, de que Russell Hantz era el diablo en persona. Y si hubiera conseguido apoyo, la historia de Survivor habría cambiado de forma radical en estos dos últimos años. Pero era del señor Hantz de quien hablaba y eso le sirvió para cavar su propia tumba.
Pero era lista. Muy lista.
Jason (Micronesia): Jason fue un gran jugador físico, pelín inocente, pero seguro que escarmentó después de su temporada, y podría resultar simpático verle de regreso.

8.8.11

My name is Bruce

Bruce Campbell era un icono freak de los noventa por haber protagonizado la saga de Evil Dead. Aquel que no le recuerde con una motosierra en el brazo matando demonios, brujas y esqueletos es que no tuvo infancia.
Aquí, dirige e interpreta una autoparodia que supera el término "serie B" para meterse de lleno en el "cutre salchichero", y no ya porque el guión sea una basura (aunque tiene sus momentos) sino porque todo en esta película es cutre. La luz, los efectos, los actores (santo dios...) y el montaje.
Pero es Bruce Campbell el que está ahí.
Y cuando el chaval le da la motosierra y él la coge, mirándola con admiración, para después soltar "He manejado muchas motosierras en mi vida pero al final... pesan demasiado" creí que me descojonaba de la risa.
En fin, horrenda de principio a fin. Sólo para absolutos incondicionales del señor Campbell.

Frak!

Maldigo una y mil veces por haber tardado tanto tiempo en conocer Battlestar Galactica. Bueno, me corrijo, en "aceptar conocer" sería más acertado, porque debido a una indiferencia casi total por las series de naves espaciales, siempre me negué a ver BSG a pesar de los comentarios que la alababan.
Pero bueno, harto de oír que era una gran serie y que bla y que bla, al final decidí darle una oportunidad. Supongo que lo hice para poder criticarla con todas las de la ley... y tuve que comerme mis pensamientos con patatas.
No todo es maravilloso, pero en general es una pedazo de serie.
En apenas un par de meses, y dilatándola a propósito, me he visto tres temporadas. Me queda una, y me da mucha rabia que sólo me quede una, así que es posible que la dilate más aún. Si soy capaz. Que no estoy seguro.
A lo que voy, BSG es definida en muchos foros como una serie sobre "religión y naves espaciales". Creo que a esa frase le falta, sobre todo, la palabra "política". Hay muchas cosas que hacen grande a BSG, y en concreto el tema de las naves espaciales acaba siendo lo de menos la gran mayoría del tiempo.
Sustentada en unos personajes brutales y llenos de matices y aristas, creo que es en ellos donde reside parte del éxito de esta serie. Sirva como ejemplo uno de los mejores personajes de la serie, Khara Trace, héroe indiscutible de la flota cuyo comportamiento temperamental y orgullo la llevan a cometer actos de moral dudosa, e incluso pasa por una etapa en la que es retirada del servicio por su poco interés por la vida. Pero vamos, otro de los mejores personajes de la serie es Gaius Baltar, y a medida que le vas conociendo su cobardía, egocentrismo y locura hacen que planee sobre él la duda de la traición y un absoluto desprecio.
Para los no iniciados, BSG empieza su historia contándote, de forma resumida, que hace años la humanidad creó una raza de robots, los Cylon, capaces de pensar por sí mismo. Las máquinas se rebelaron, hubo una guerra, y los Cylon se exiliaron. Desde entonces, todo intento de contactar con ellos ha dado con el mayor de los vacíos... hasta ahora. La serie comienza con los Cylon dando nuevas señales de vida y devastando las doce colonias humanas con bombas nucleares. Apenas 44000 personas logran evitar la muerte, los que se encontraban a bordo de las pocas naves que escapan del ataque. Todas son naves civiles, excepto la Battlestar Galactica, una nave de combate vieja y a punto de pasar a la historia como museo y que se convierte de repente en la única defensa de esas naves civiles que llevan a bordo lo poco que queda de la humanidad.
Bajo ataque constante de los Cylon, el Comandante William Adama y su tripulación emprenden una huída a través del espacio siguiendo los pasos de una antigua profecía que hablaba de encontrar el camino de regreso a un mítico planeta llamado Tierra.
Y así, señores, empieza BSG, una serie con una mitología tan potente como fue en su momento la de Lost, con unos personajes muy interesantes y con un devenir cada vez más atractivo. La religión, el amor, y sobbre todo la política, juegan un papel verdaderamente importante. En la balanza de juego, la supervivencia de la humanidad.
En su contra, ese afán por hacer capítulos excesivamente capitulares mezclados con capítulos seriados hace que algunos de los capitulares supongan una piedra en el camino y que incluso algunos resulten terriblemente aburridos. Me pasó en la primera temporada, y sobre todo en la tercera, donde hay tres o cuatro seguidos que son para asesinar guionistas. Por suerte, cuando la serie vuelve a coger ritmo es inmejorable, y los finales de temporada, al menos de la uno, la dos y la tres, son brutales. Vamos, con el de la tercera se me quedó la boca abierta un ratito...
Disfruté como un enano de la primera mitad de la segunda temporada, con esa sublevación militar y ese cuasi golpe de estado (impagable el personaje del Coronel Tight y su absoluta incapacidad para mostrarse lider cuando es necesario y sin recurrir al alcohol), disfruté como un enano con la primera mitad de la tercera temporada (impagable Gaius Baltar y su puta cobardía que te hace odiarle como nunca) y disfruté como un enano con los dos últimos capítulos de la tercera temporada, sencillamente geniales. Hay más momentos que disfruté como un enano, la llegada de la Pegasus y todo lo que implica fueron capítulos impresionantes, y algunos otros capítulos que funcionan sueltos como pequeñas obras de arte.
En general, una gran serie que me alegro de estar disfrutando aún.


4.8.11

Monsters

Película independiente con reminiscencias de ciencia ficción pero que no deja de ser una road movie en la que un tipo y una tipa se enamoran mientras contemplan lo horrible que puede ser la muerte y blablabla...
No sé, me daba pereza verla y tendría que haber seguido mi instinto, porque la verdad es que me ha aburrido, aunque la premisa, vale, me gustaba, pero al final, creo que es de esas películas que dan esperanzas pero a la hora de contar lo que llevan un rato haciéndote desear, deciden irse por la tangente.
En fin, que no digo que sea mala, aunque no me parece buena, pero desde luego, yo me he aburrido.

3.8.11

A bout portant

A Bout Portant, también conocida en el mercado anglosajón como Point Blank, es un thriller al más puro estilo francés. Rodada con un estilo de reminiscencias clásicas y con una trama envolvente que va in crescendo durante toda la película.
La historia, de base, es sencilla. Un celador de hospital y su mujer embarazada de siete meses (que por cierto, es Elena Anaya, con más ropa de la que nos tiene acostumbrados) son asaltados en su propia casa, a ella la secuestran y a él le obligan a liberar a un tipo que se encuentra en el hospital donde trabaja, custodiado por la policía, bajo la amenaza de matar a su mujer si no colabora.
Y digo de base, porque luego la cosa se complica, y hay más trama detrás de esa base. Una trama que es puro thriller.
La verdad es que la película me ha encantado. Me ha parecido que está bien rodada, que no pierde fuerza en ningún momento, y además, con secuencias dignas de prestar atención, como la persecución a la que tres policías someten al celador, a pie por calles y estación de metro, pura adrenalina sin prácticamente diálogos durante algo más de cinco minutos. Brutal.

2.8.11

Dead or Alive

Tras un prometedor, aunque surrealisticamente editado, la cosa se pone lenta y tediosa. Ni la historia es nada del otro mundo ni visualmente me impresiona como si lo consiguen otros orientales como Johnie To.
Aunque puedo decir sin ningun tipo de verguenza que después de esa alocada secuencia final se me quedó la mayor cara de gilipollas que jamás ha cruzado por mi cara.
¿Qué demonios es eso?
Aún sigo parpadeando incrédulo.
Me reafirmo en que los japoneses están chalaos...

Quarantine 2: Terminal

No sé qué esperaba ver, pero desde luego no esto. Al ser Quarantine 1 un remake de la españolísima REC, imaginaba que me encontraba ante un nuevo producto en primera persona. Y oye, para nada. No he visto Quarantine 1, pero bueno, el caso es que esta segunda parte es una película convencional, que olvida el tema de la cámara en mano en primera persona, y que, la verdad, no está nada mal.
Después de una presentación de personajes bastante normalilla, se desata el brote de zombis en un avión en pleno vuelo. Creyendo que se trata de rabia, aterrizan en un aeropuerto donde el ejército les pone en cuarentena. Y hala, ya está, zombis correteando detrás de los personajes, un montón de muertes y chimpún. Todo lo que un fan de los zombies quiere ver.
Lo que más me gustó de la película fue el hecho de que, a excepción de la protagonista, el resto de personajes son carne de cañón para el momento menos esperado. De hecho, en un par de ocasiones me sorprendió que algún personaje muriera tan pronto.
¡Vivan los zombis! (aunque no tenga mucho sentido como frase)