3.10.06

Santander Ladrón Hispano, Capítulo 1

Todos conocéis a la perfección mi emoción por las series, y este verano he tenido la oportunidad de protagonizar una de las más intrigantes que jamás he visto. Hay de todo: intriga, suspense, tecnología...
Os voy a hacer una descripción del capítulo primero:
La historia se inicia con una banda de hackers búlgaros, lo cual ya en sí mismo es un distanciamiento de las típicas premisas norteamericanas. Aquí los árabes, rusos y chinos no se pueden quejar porque siempre se les pinte de malos. En esta serie el enemigo es una banda de hackers búlgaros, que logra traspasar las barreras de seguridad del banco Santander Central Hispano y arrasar las cuentas de varios de los clientes de ese banco.
Pero los bancos todos sabemos que son muy listos, por lo que se dan cuenta al instante de que hay un robo en curso, así que se ponen en contacto con la policía. Aquí entra en funcionamiento el Jack Bauer de la serie, que es el agente encargado del caso y el que llevará el peso de la acción en esta magnífica serie. El equipo a su cargo, el grupo de investigación, hace las veces de la CTU (La UAT en su versión española).
Jack Bauer comanda la incursión para detener al búlgaro en cuestión. No hay ningún tiroteo, que en este país no hay presupuesto para pirotecnia, pero la detención se lleva a cabo con una buena dosis de emoción para el espectador.
El siguiente paso de Jack Bauer es ponerse en contacto con los afectados, porque ya se sabe que esas cosas tiene que hacerlas la policía, que para qué va el banco a avisar a sus clientes de que les han desvalijado.
Aquí entra en acción el mismísimo Hopewell, que en ese momento está paseando por la calle con su chica (esta relación es la que propiciará las tramas secundarias de amor). Jack Bauer informa a Hopewell de lo ocurrido y a Hopewell se le queda una cara de gilipollas que inmediatamente captará los corazones del público.
De repente, Hopewell se ve sin un puto duro (lo que propicia una serie de problemas económicos y vitales que son buenas tramas secundarias y que pueden conseguir que el espectador se sienta identificado) y debe ir a comisaría a poner una denuncia. Después, con todos los papeles en cuestión, se presenta en el banco y solicita el regreso de su dinero a la cuenta.
Días más tarde, Hopewell recibe una carta en la que el banco, cual Poncio Pilatos, se lava las manos y asegura que no van a devolver ese dinero a la cuenta de su cliente porque el robo ha sido responsabilidad del propio Hopewell.
"Pero si yo soy el cleinte" se dice Hopewell, "pero si fueron ellos los primeros en darse cuenta de que había un robo en curso, si en realidad les han robado a ellos, solo que casualmente ha sido mi dinero en concreto, pero esto es un poco como si Dillinger entra en una sucursal y la saquea, pues la responsabilidad es del banco, no del cliente. ¿Acaso no tengo yo el dinero en el banco para que me lo cuiden y justo eso es lo que no han hecho?"
Al día siguiente, dispuesto a poner una reclamación en toda regla, Hopewell intenta sacar su paga del mes que ya le ha sido metida en el banco. Seiscientos y pico euros. Y un empleado del banco en cuestión, recordemos, Santander Central Hispano, le dice que para cantidades mayores de 300 euros hay que pedir una autorización.
Y es entonces cuando Hopewell cae en la cuenta de lo que ha pasado, momento culminante del capítulo y trama central de la serie. En realidad él no es más que un cabeza de turco de un complot mucho mayor organizado por el Banco Santander Central Hispano (porque lo de que las multinacionales sean las malas da mucho juego en pantalla aunque todo el mundo sabe que eso nunca es verdad) cuyo objetivo en realidad es que toda la gente empiece a operar por internet y organizar un gran robo a todo el mundo, porque de esa manera podrán quedarse con el dinero y decir que la responsabilidad es de los clientes. Un gran complot para estafar a sus clientes. El verdadero Bauer se ha enfrentado incluso al presidente de EEUU, pero ahora Hopewell se da cuenta de que en realidad es el señor Botín su enemigo. El caso se presenta difícil. Máxime teniendo en cuenta la trama secundaria de las vicisitudes que tendrá que superar ahora nuestro protagonista para vivir sin un puto duro, que es la parte donde la serie hará inciso en el realismo social que tan bien se nos da en España.
To be continued...
¿Irreal? Puede ser, pero ya sabemos todos que a veces la realidad supera a la ficción.

3 comentarios:

adrimedia dijo...

FANTÁSTICA SERIE! NI 24 NI PRISON BREAK NI HOSTIAS!

y no olvides la otra subtrama que implica a hank chinaski intentando recaudar fondos para la operación Vendetta contra el SCH...

Álvaro Loman dijo...

Para otra subtrama, puedes utilizar lo que me ocurrió a mi en el mismo banco:

Jack Bauer va a cobrar un cheque y le dicen que no pueden porque el Sistema Operativo del banco donde se emitió el cheque ha cambiado. Que vuelva en una semana y se solucionará o le dará el dinero de su bolsillo (13 míseros euros). A la semana siguiente dicen que no está solucionado. Jack Bauer asiente. Le dicen que espere 7 temporadas más.

A la siguiente semana va y, como le dicen que no se puede cobrar todavía y que se debería ir a Madrid a cobrarlo, Jack Bauer monta en cólera y les pone a parir a todos delante de unos diez clientes más.

Luego, Jack Bauer se va a su banco habitual, donde le solucionan el problema ipso-facto, pero cobrandole 2 euros de comisión, por ser el cheque de otro banco...

Jack Bauer ya tiene trama para otra temporada... Matar al banquero.

Anónimo dijo...

final alternativo para la serie:
pintar y reventar absolutamente todas las oficinas de santander, ladrón hispano y colgar por los pulgares a Botín...