4.3.07

Una noche para la historia

Teniendo en cuenta que había gente acampando a las puertas de las tiendas que iban a abrir a las doce de la noche para vender en exclusiva las entradas de Héroes del Silencio, se me hizo una locura intentarlo en la tienda y aposté por el cajero.
A las diez de la noche, la situación era dantesca. Decenas de personas haciendo cola en los diversos cajeros de Ibercaja, a la espera de la medianoche, para comprar su dichosa entrada.
Ocurrió lo inevitable. Y es que lo que no me explico es que, si no tienes un sistema capaz de resistir la esperada e inevitable avalancha que se va a desencadenar, ¿para qué pones a la venta nada en tu sistema? Pues eso, que a las doce en punto, en todos los cajeros de ibercaja de españa, alguien metía su tarjeta de crédito con la esperanza de comprar su entrada... y el sistema colapsó.
Poco a poco, la gente fue dándose por vencida. Pasamos de estar en el puesto quince de la cola a estar los primeros en cuestión de dos horas y media. Las 2:30, un frío de pelotas, de noche en Madrid, y probando una y otra vez en el cajero, la maldita tarjeta, y una y otra vez el mensaje de error, sistema sobrecargado.
Nos dividimos, a la desesperada. En Sun Records iban a abrir a las diez de la mañana y tenían a la venta quinientas entradas. Uno de nosotros se lanza para allá mientras el otro continúa probando en el cajero, una y otra vez. ¿Cuántas veces puede meterse la tarjeta en la ranura en cuestión de una hora?
En Sun Records la situación no era mucho mejor. Había cola, había sacos de dormir, había mantas, había cartones para paliar el frío, uno se hace amigo de los desconocidos, hay buen rollo, charlas amenas, risas y bromas con la situación de la vivienda para los jóvenes que esa noche dormíamos en la calle, todos apretados, porque ni las mantas ni los cartones nos libraban del todo del frío.
A las seis y media de la mañana, el sistema de cajeros se liberó, apenas un poco, pero lo justo para que consiguiéramos nuestras entradas. Abandonamos Sun Records, abandonamos Ibercaja, y nos vamos a casa, como quien vuelve de una noche de fiesta, casi amaneciendo, un frío de pelotas, pero con la entrada a buen recaudo en el bolsillo.
12 de Octubre, Zaragoza, Héroes del Silencio.
Allí estaré.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

queremos la crónica de "the host"!

Álvaro Loman dijo...

¡¡Felicidades!!

Veo que al final optaste por ir al concierto en vez de comer ¿No? XD

Buena elección, que disfrutes el conciertazo.

Por curiosidad ¿Entrada normal o VIP?